El frío invierno, la nueva amenaza de los niños refugiados

Las temperaturas bajo cero están debilitando la salud de los niños refugiados. El duro viaje en busca de un lugar más seguro para vivir los deja exhaustos, asustados, estresados y muchos de ellos caen enfermos.

Desde UNICEF se ha empezado a distribuir material para el invierno: mantas, abrigos y zapatos, además de agua y medicinas. En los países de mayor afluencia de refugiados, han instalado sistemas de calefacción en los espacios dedicados a la infancia, donde los niños juegan y aprenden.

En 2015, más de 1 millón de refugiados y migrantes cruzaron el Mediterráneo para llegar a las costas europeas; entre ellos había 253.700 niños. En las zonas montañosas, las más afectadas por el frío, se calcula que la temperatura podría llegar a los 13º bajo cero. Esto les hace más vulnerables pudiendo hacer que estos niños mueran de hipotermia.

Hazte socio de UNICEF y ayuda a llevar seguridad y calor. ¡Tú puedes protegerlos!

Teléfono de contacto: 902 31 41 31
E-mail: socios@unicef.es